martes, 3 de julio de 2012
El debut de la Selección Nacional
de Basket en el repechaje no fue para nada placentero, lo que se
suponía debía ser un paso de bandera acabo siendo un tortuoso parto
lleno de errores y malas ejecuciones, pero también de mucho corazón.
El juego en cuestión no podía
haber empezado peor. Los Coreanos enchufados de tres, Coronado en
problemas de faltas, la ofensiva desorganizada y hasta fallos en la
línea de libres, iban pintando una situación sombría que se profundizaba
a medida que avanzaba el juego.
Hicieron falta 25 rebotes de Jack
Michael y 30 puntos de Al Horford para poder quitarnos de encima a
estos asiáticos, que además de que parecían todos ser apellido Lee, se
las ingeniaron para ponernos a sudar definitivamente más de la cuenta.
Aún así, el equipo mostró pasión y
entendió que hoy se jugaba la vida. La victoria nos permite avanzar a
la próxima ronda y evita un decepción que solo me hubiera recordado a
Panamá en el 2005 o a Islas Virgenes en el 2006 cuando nos quedamos en
la orilla de manera inexplicable.
Hoy, Calipari gritó como nunca y
mostró ese sentido de urgencia que tantas veces nos hizo falta.
Combinandose así, con el arrojo a nuestros jugadores de la pintura para
tapar las fallas de un perímetro que tiene que mejorar mucho si queremos
seguir avanzando.
Muchas cosas se pueden aprender
de la lección aquella de no tomar enemigos como pequeños. Sin embargo
todos podemos dormir tranquilos, con la satisfacción de superar la
primera prueba (Si con el corazón en la boca)
Los grandes equipos enseñan el
corazón, aún el día en que su talento los traiciona. Hoy tocó ganar uno
de esos, con "guaramo" como dicen en Venezuela. Ya habrá momentos para
ganar bonito, por ahora seguir ganando es la meta en el horizonte.
Ahora toca pensar en Rusia, con
la tranquilidad de no tener presión hasta la segunda ronda. Para mi, es
momento de bajar la adrenalina,claro está en el lobby del hotel y probar
por primera vez el etílico en este periplo.
Antes de destapar la fría, me
permito hacerle una advertencia de rigor amigo lector, una que le va
servir para el resto de este torneo y en caso de que como yo, decida
enganchare en esto como proyecto de vida:
Si usted se subió al barco de la
selección ahora, prepare sus medicamentos, porque en este asunto, el
sufrimiento siempre viene incluido.
Ojo, que soportarlo hasta conseguir la gloria siempre será opcional.
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