miércoles, 6 de marzo de 2013
Santo Domingo. Al Horford atraviesa por el mejor momento de su carrera
en la NBA y el seleccionado nacional tendrá en agosto otra gran
oportunidad de clasificarse a un evento mundialista, una que no ocurre
desde 1978.
Pero mientras seguidores del baloncesto dominicano abrigan sus
aspiraciones clasificatorias al momento de Horford, el equipo del
delantero/centro y el jugador parecen tener otros planes para el próximo
verano.
Ya el jugador dejó entrever el mes pasado que en la temporada muerta
puede que tenga que descansar y esta semana confirmó que tomará una
decisión al concluir la temporada.
Esta semana, la prensa de Atlanta reportó que el cuerpo técnico de los
Hawks tiene un cronograma de trabajo para hacer correcciones físicas en
el pecho del hijo de Tito y Arelis Reynoso.
Jeff Watkinson, preparador físico al que Horford atribuye parte de su
éxito esta campaña, le dijo al diario Atlanta Journal-Constitution que
el trabajo del verano consistirá en trabajar el músculo pectoral que
sacó al jugador de competencia por tres meses la temporada pasada.
De acuerdo con Watkinson, si bien Horford no ha experimentado dolor en
el músculo operado hay un desajuste y a menudo se aprieta por lo que
constantemente hay que colocarle hielo tras los partidos. El técnico no
explicó si habrá que pasar por el quirófano.
El nacido en Puerto Plata hace 26 años viene de anotar 20 o más puntos
en nueve partidos al hilo antes de terminar con 18 el lunes en Golden
State. Esa corrida le permitió subir su media a 17,3 puntos y 10 rebotes
y lleva 31 partidos con dobles-dobles.
Según Watkinson, el dominicano vino al país durante la pausa del Juego
de Estrella y se integró a los entrenamientos un día antes del grupo.
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