No anotó 30 puntos. No atrapó 20 rebotes ni repartió 15 asistencias.
Pero la actuación alcanzada por Al Horford en el quinto partido de la
serie entre sus Hawks de Atlanta y los Celtics de Boston no es segunda
de ninguna en la historia de la participación de los dominicanos en la
NBA.
Y no es solo por la cantidad y variedad de las estadísticas acumuladas en el encuentro.
También hay que tomar en cuenta las circunstancias en las cuales se produjo su actuación.
Sus números fueron los siguientes: 19 puntos (máximo anotador del
partido), 11 rebotes (segundo mejor detrás de los 16 de Josh Smith),
tres asistencias, tres bolas robadas (empatado con Paul Pierce como el
segundo mejor) y tres lances bloqueados (la mayor cantidad en el
desafío).
Pero es que fue apenas su segundo partido tras perder la mayor parte de
la serie regular debido a un desgarre en el músculo pectoral.
Y además su actuación se produce en un partido de vida o muerte para su
equipo ya que de perder habrían perdido la serie, que ahora siguen
dominando los Celtics, 3-2.
Encestó un canasto con 1:34 por jugar que puso la pizarra 87-83 a favor de su equipo.
Un triple de Pierce puso a uno a los Celtics.
Luego de un fallo de Pierce, los Hawks sacaron de un lateral faltando 10segundos.
Rajon Rondo le robó un pase de Smith a Joe Johnson, avanzó hacia el
costado ofensivo, pero se encontró acorralado en una esquina por
Horford, quien no le permitió ni tirar ni pasar y Rondo finalmente
terminó perdiendo el balón para decretar la derrota de Boston.
Horford dio una demostración, otra vez, de gran vergu¨enza y entrega a
la causa de su equipo. No por nada es considerado el LÍDER del equipo de
los Hawks.
Tanto dentro como fuera de la cancha, Al se ha ganado el respeto de
compañeros y adversarios. Con su actuación del martes no ha hecho otra
cosa que ratificar su condición de jugador ESTRELLA de la liga, aunque
muchos incrédulos, sobre todo en el país, todavía le regateen su estatus
ganado a fuerza de habilidad, trabajo, inteligencia y un gran manejo de
los fundamentos del baloncesto.
FASTBREAKS.- Ayer se cumplió el segundo aniversario de la partida
de este mundo del inolvidable periodista, colega y amigo Iván Brea. Sin
embargo, a pesar de su ausencia física, los que compartieron con él
sienten que todavía está aquí, en el corazón y la mente de todos.
Dios le bendiga donde quiera que esté, que no es más que jugando,
escribiendo o trasmitiendo un partidode baloncesto en una cancha
celestial.
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