Eulis Báez: "Soy pequeño, pero en la zona me hago grande".

Esta noche se enfrenta al Real Madrid vistiendo la camiseta del FIATC Joventut donde llegó hace ocho jornadas y al alero dominicano Eulis Báez no le asusta el reto. "Jugar contra los que están arriba siempre es una motivación especial y a nosotros lo único que nos interesa en lograr victorias sin importarnos quien es el rival. Creo que si hacemos las cosas correctamente hemos demostrado que podemos conseguirlo y más ahora que lo necesitamos tanto".

Ud. ya sabe lo que es ganar al Madrid, lo hizo la pasada temporada en Valladolid (74-65). ¿Cree que ha cambiado mucho en esta campaña?

-Lo que tiene más ahora que la temporada pasada son más tiradores porque la llegada de Carroll le da más poder exterior. Sea como sea son un gran equipo y el ganarles siempre te hace sentir bien y da confianza al equipo y a los jugadores individualmente.

Tenía ofertas de fuera de España y eligió el Joventut ¿Porqué?

-Decidí venir al Joventut porque ese nombre ya lo dice todo en cuanto a baloncesto por historia, por tradición y porque siempre he querido jugar para uno de los grandes. Ya sé que no somos la plantilla que ha tenido este club en otras temporadas, pero sólo el hecho de representar el club me da fuerzas para esforzarme cada día más, tanto individualmente como para mejorar como grupo.

Es el jugador con más minutos, máximo anotador, máximo reboteador y más valorado de toda la plantilla badalonesa, además de ser el mejor reboteador ofensivo de la liga. ¿Es también el líder del equipo?

-Llegué de la República Dominicana con mucha confianza porque allí las cosas me están yendo de manera muy positiva, ganando partidos, que es lo que me da el extra y aquí las cosas me van bien individualmente pero los resultados no nos han acompañado mucho. Eso me hace sufrir un poco porque el mi aportación individual no está ayudando tanto al equipo como me gustaría

Lleva seis años en España ¿Quién le trajo aquí?

-Llegué aquí en el 2005 de la mano de mi representante, Regino Olivares quien me habló de la liga española y me dijo, que había una oportunidad para jugar aquí y fiche por el Akasvayu Vic de la LEB Plata cuando terminé mi último año de Universidad. No fui elegido en el draft del NBA porque no me lo planteé y eso no es ya una asignatura pendiente para mí porque la liga Endesa es una gran liga.

¿Se siente un triunfador?

-Mire, yo salí de la República Dominicana con 17 años para Estados Unidos y no tenía recursos, vengo de una familia humilde, quería tener la oportunidad de abrirme camino por mi propia cuenta y creo que lo he conseguido. Creo que eso me da fuerza para esforzarme cada día para poder mejorar.

¿Dónde está su meta?

-Ahora me gustaría poder jugar un playoff. Llevo dos años en la liga ACB y el año pasado estuvimos rozando estar en él. Ese es mi primer objetivo ya que en los playoff los partidos son más competitivos y juegas contra los mejores.

Es el máximo reboteador ofensivo de la liga con sólo 2,01 metros. ¿Dónde está el secreto?

-Soy pequeño de estatura, pero en la zona me hago grande Eso es así porque tengo que hacerlo ya que los rivales tienen la ventaja física sobre mi y la única forma que yo conozco de suplir esto es jugando fuerte y peleando. Es lo que voy ha seguir haciendo hasta que me retire o el cuerpo diga basta.

Y hoy se va a pelear con Mirotic, Velikovic, Reyes, Tomic...

-Claro que sí. Yo les miro para arriba pero ya intentaré sacarles ventajita con mi fuerza y mi velocidad. Creo que la manera de batir al Madrid es cerrarle mucho la pintura y no dejarles que corran porque si lo hacen logran canastas muy fáciles. Hay que alejar a sus pívots del aro. Si nos ganan que sea porque tienen un gran día desde el exterior.

Con 29 años es un veterano en la plantilla ¿conlleva eso más responsabilidad?

No me lo considero; aquí me han hecho sentir como un veterano y no me gusta sentirme así porque pienso que soy viejo. Hay muchos jugadores jóvenes y donde he estado el más joven era yo, como en Valladolid el año pasado con una plantilla veteranísima, con una media de casi 28 años. Aquí es muy diferente y ya me he acostumbrado; eso de ir un poquito de 'jefe' me gusta y me hago respetar.

¿Se siente superior?

En absoluto. Me gusta mantener la armonía con los chicos. No me gusta que me vean como un superior. Como somos un grupo que todavía estamos aprendiendo nos gusta comunicarnos entre nosotros de la manera más amigable posible por decirlo así. Son jóvenes y cuando juegas con veteranos todos gritan en la cancha para sacar garra . Aquí es diferente no se puede gritar tanto porque desconcentras a los jóvenes y los sacas del partido; es mejor tratarlos bien hasta que se acostumbren y se hagan un poquito más hombres.

Nacido en Villa Consuelo, un modesto barrio de Santo Domingo, donde se le considera un ídolo, y más este año que ha ganado la liga dominicana con los Leones, comenta que se siente muy orgulloso de que sus paisanos le vena como un buen deportista. ¿Es cierto que la familia es el reposo del guerrero?

-Por supuesto, vivo en Montgat, cerca de Barcelona, que es un sitio tranquilo con mi esposa Chandra que es estadounidense, y mis tres hijos. Brice, de 9 años, Gavin de 4 y Kevin de 1 y medio La verdad es que el que ellos estén aquí ayuda mucho. Estuve tres meses solo cuando llegue a Vic y se pasa muy mal. La familia te ayuda a desconectar; mis hijos me contentan la vida y mi familia me ayuda a superar los malos momentos.