domingo, 21 de julio de 2013
Desde hace tres años he visto los cambios de jugadores que se han ido
realizando en la liga con mucho detenimiento y preocupación. He visto
como los jugadores son vendidos, cambiados y prestados.
Ya a la mitad del torneo de la etapa regular de la temporada que corre,
he comenzado a ver cambios y oír rumores de préstamos y ventas de
jugadores.
Se que los dueños de la Liga son exitosos comerciantes, de algunos de
ellos he aprendido mucho sobre que hacer y también, que no hacer en
varias situaciones en este negocio.
Héctor Báez |
Uno de los problemas de la Liga, desde luego, a mi entender y opinión,
es que los ocho dueños no se dejan administrar, ellos tienen la ultima
palabra en las decisiones de ésta, y eso es peligroso. Es peligroso,
porque al final, cada equipo o dueño, tomará las decisiones que mas le
convengan a su franquicia, obviando el beneficio colectivo de la Liga.
Estos prestamos, cambios y ventas/compras de jugadores tienen que ser
reglamentados bajo leyes enfocadas en la paridad económica y técnica de
la Liga. En la mayoría de estas transacciones, la calidad en los
jugadores envueltos es desproporcional en demasía, las ventas no son
transparentes y los préstamos no debieran de acontecer.
La administración de la Liga debe de regular por mediación a su
reglamento de competencia o técnico todas estas transacciones, las
cuales de seguir ocurriendo de la forma en que han ido sucediendo
podrían ir en desmedro de la ética, transparencia, buen manejo,
honestidad y competencia sana en que debe operar la Liga.
Entre estas regulaciones tienen que prohibirse los prestamos, las
transacciones de dinero tienen que ser transparentes y los cambios por
jugadores tienen que ser por jugadores de similar calidad, o una
combinación de jugadores, que incluya varios jugadores de reconocido
talento, como también, al igual que haya paridad económica entre los
cambiados.
Hay que tener cuidado con la independencia, el poder y el hacer lo que
conviene; la Liga todavía no corre, anda a pasos lentos, todavía hay que
afianzarla y demostrarle al publico dominicano de que no solo es el
mejor nivel técnico del país, pero también, el mas honesto, transparente
y administrativo.
Estamos delante de un excelente comienzo, tres años de un avance
extraordinario, pero hay que seguir mejorando, y siempre hay mucho
espacio para la honestidad, transparencia, respeto a las reglas y la
competencia leal y sana.
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