Phoenix,
Arizona.- Me llevó mucho tiempo decidirme, a pesar de los incontables
llamados por Edison Brito, pero no hay plazo que no se venza y ya creo
que es el tiempo correcto para escribir sobre mi experiencia en la Liga
de Las Américas, evento que patrocina Fiba Américas y que aglutina los
Clubes Campeones del área.
Como los campeones del la LNB
2011 Leones de Santo Domingo ostentó la representación de nuestro país y
dicho reto fue asumido con gran responsabilidad por todos los
ejecutivos encabezados por Eduardo Najri, José Miguel Bonetti, Pedro
Pablo Pérez y un servidor, junto al dirigente José “Maita” Mercedes.
La temporada muerta en la LNB,
obligaba a buscar a los mejores jugadores disponibles en el país, ya que
la gran mayoría de Leones originales, estaban diseminados por la
geografía mundial y el compromiso había que honrarlo.
Los primeros en aceptar la
invitación a formal parte de Leones en Liga de Las Américas fueron el
Cocolo Giancarlo Acosta y los Cañeros Juan Pablo y Alexis Montas,
quienes se unieron a los tres Leones Manuel Fortuna, Manuel Guzmán y
Jonathan Rodríguez.
Para
la posición de armador fue invitado de los Reales Ricardo Soliver y
como refuerzos tuvimos al Cocolo (Centro) Evan Brock, al Combo Guard
Casey Wohlleb y al Pequeño Delantero Roger Washington, se unió al grupo
en calidad de nativo el Indio Eddie Elisma.
Para completar los 12 jugadores
llegó desde argentina el Real Juan “Pedales” Coronado, quienes bajo la
dirección del Coach Mercedes iniciaron los entrenamientos el 20 de
febrero, con 18 días previos al evento que iniciaba el 9 de marzo.
Un total de 24 sesiones fueron
realizadas, pero no hubo oportunidad de conseguir partidos de fogueo, ya
que ningún equipo de ese nivel se encontraba en condiciones para
enfrentarlos, solo los que participarían en el torneo de Santiago
estaban en preparación en el país y nunca se pudo coordinar la logística
de fogueos.
A pesar de que se pudo integrar
un núcleo excelente de jugadores, la falta de partidos de prácticas
seria uno de los principales obstáculos por salvar, además de los que
representaba enfrentar a los Campeones de Venezuela y Puerto Rico
Cocodrilos y Capitanes y a los Brasileños del Joinville.
La contienda inicio contra los
Cariocas y a pesar de no realizar un buen partido por problemas en la
fluidez del ataque, nuestra defensa nos mantuvo en juego, hasta que
pudimos establecer el ritmo de juego y vencer al Joinville de forma
convincente 74-66.
Llegó el día sábado y el
enfrentamiento a los dueños de la casa los Capitanes de Arecibo y
después de haberlos dominados por 39:58 y ganando por 3 puntos, vino el
milagro de un disparo desde más de media cancha por Larry Ayuso que
provocó ir a tiempo extra y el mismo Ayuso se encargó de ganarnos
anotando 10 puntos en la prórroga, incluyendo un canasto de campo para
la victoria de los locales 83-85
Mientras Cocodrilos se reponían
de un mal comienzo en la serie al caer derrotados por los Capitanes
70-88 y consiguieron derrotar al Joinville Brasileño 90-85, consiguiendo
preparar el escenario para el partido del domingo 11, donde Leones y
Cocodrilos se enfrentarían en busca del pase a la segunda ronda.
Tengo que destacar el gran
esfuerzo realizado por Mercedes y Hansen en lo que al aspecto
psicológico del juego se refiere, tratando de sacar de las mentes de los
jugadores la sorpresiva derrota de la noche anterior del canasto de
Ayuso.
No tengo dudas que si Ricky
Soliver hubiese gozado de buena salud, el partido lo hubiéramos dominado
de forma convincente, pero el jugó con un 70% de desgarre en el talón
de Aquiles y solo su gran corazón lo mantuvo en la cancha, haciendo su
mejor esfuerzo.
Su compañero de la posición,
Pedales Coronado aunque con una gran integración y dedicación, realizó
su mejor esfuerzo, pero su mentalidad de copioso anotador, muchas veces
lo traicionaba a la hora de correr los sistemas o de definir la
terminación de los contraataques.
Un total de 16 balones perdidos
en el partido habla claramente de la poca fluidez en el ataque por las
situaciones antes expuestas, 13 de ellos en los primeros 25 minutos del
partido nos otorgó una desventaja de hasta 12 puntos, la cual con un
cuarto periodo casi perfecto y que dominamos 27-22 no fue suficiente
para remontar el déficit y caímos vencidos de 4 al cerrar 78-74 y quedar
fuera de la siguiente ronda.
Aprendimos que la Liga de Las
Américas al igual que el baloncesto internacional, hay que jugarlo
físico y correr los sistemas con hombres que salgan de los bloqueos,
pero con verdaderas pantallas, ya que el baloncesto dominicano adolece
de ese tipo de práctica y los choques y fuertes contactos son permitidos
por los árbitros, lo que obliga a realizar una re estructuración de
nuestros sistemas a la hora de enfrentamientos internacionales HAY QUE
SABER CHOCAR.
En sentido general fue una
agradable experiencia, donde la disciplina del grupo fue excelente y
donde finalizamos la ronda sin una sola falta técnica, sin ninguna
amonestación y con el reconocimiento de los organizadores del gran nivel
competitivo presentado a pesar de que no conseguimos la clasificación,
en realidad presentamos un gran equipo, que solo un tiro de suerte nos
dejó fuera de la segunda ronda.
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